Basada en perturbadores hechos reales y dirigida por Bennett Miller (‘El juego de la fortuna’ y ‘Capote’), ‘Foxcatcher’ brilla por sus excelentes actuaciones. Ninguna, claro está, destaca más que la de Steve Carell, quien da un increíble salto de sus típicos roles cómicos al de este escalofriante personaje, a través de quien nos adentramos a la comunidad deportiva estadounidense y al supremo culto a la victoria. La película fue nominada a cinco premios Óscar: mejor director (Miller), mejor actor (Carell), mejor actor de reparto (Mark Ruffalo), mejor guión y mejor maquillaje.
Esta biopic recuenta la vida de uno de los atletas más importantes de todos los tiempos, un hombre que en 45 minutos rompió tres récords mundiales y empató otro. Jesse Owens destrozó el mito nazi de la supremacía aria en los Juegos Olímpicos de 1936, en los que ganó cuatro medallas de oro. ‘El triunfo del espíritu’ es una gran historia sobre la superación de la discriminación, y de todas las desventajas que ella conlleva.
Dirigida por Craig Gillespie (‘Lars y la chica real ‘), ‘Yo, Tonya’ se basa en la increíble y controvertida historia real de la patinadora artística Tonya Harding, quien desafió todos los pronósticos y se convirtió en campeona nacional de su disciplina, hizo historia como la primera mujer que logró ejecutar exitosamente un salto triple axel en competencia, y avanzó hasta convertirse en una patinadora de talla olímpica… sólo para ver su pequeño legado derrumbarse por los nexos a la conspiración de su exesposo para atacar a la patinadora rival, Nancy Kerrigan. Con entrevistas estilo falso documental cargadas de un oscuro humor, la película reconstruye los hechos (y contradicciones) de uno de los escándalos deportivos más grandes de los noventa, con maravillosas actuaciones de Allison Janney y Margot Robbie (‘Escuadrón Suicida’), quien se consolida como una de las actrices más prometedoras de su tiempo.
Seleccionada para competir en el eventualmente cancelado Festival de Cannes en 2020, ‘Nadia, Butterfly’ es un drama canadiense con una curiosa dualidad. Es ficción se sitúa, curiosamente, en los Juegos Olímpicos de Tokio de 2020 que no sucedieron ese año–, pero juega un poco con la realidad: su protagonista es interpretada por la canadiense Katerine Savard, quien no es en realidad actriz sino nadadora profesional especializada en mariposa y con varios récords a su nombre. La película, con intervenciones de las también nadadoras Ariane Mainville y Hilary Caldwell, lidia con la vida de sacrificio que deben llevar los atletas de alto rendimiento, capturando las complejas motivaciones y contradicciones de dicha trayectoria.
‘La campeona de bronce’ (también conocida por su título original, ‘The Bronze’) es una comedia independiente con el humor ácido tan típico del Festival de Sundance, así que no sorprende que haya sido parte de la selección para la edición de 2016. En la trama, Melissa Rauch (‘The Big Bang Theory’) da vida a una exgimnasta frustrada que debe entrenar a una joven atleta para alcanzar el sueño que ella nunca pudo: ganar el oro olímpico. Es una película interesante, pues trata sobre las dificultades de lidiar con las desilusiones de la vida y sobre cómo eso nos impide abrirnos a nuevas oportunidades. El guion tiene bromas bastante ácidas que pueden ofender a quien no acostumbre ver películas de este tono, y en el contexto actual podría ser más problemática de lo que fue en su momento. Rauch es fabulosamente detestable y hace un trabajo perfecto en el papel. Ella es acompañada en el elenco por Haley Lu Richardson (‘Unpregnant’), Sebastian Stan (‘Capitán América y el Soldado del Invierno’), Thomas Middletitch (Silicon Valley’) y Gary Cole (‘No me las toquen’). Todos son maravillosos, particularmente Stan en su rol como un entrenador tan insoportable como la protagonista.