‘Flash’ decepciona en taquilla durante su primer fin de semana en cartelera ‘Flash’ decepciona en taquilla durante su primer fin de semana en cartelera

‘Flash’ decepciona en taquilla durante su primer fin de semana en cartelera

‘Flash’ pierde impulso al comienzo de la carrera, y tendrá que apresurarse para recuperar sus costos de producción en la taquilla global.

Lalo Ortega   |  
19 junio, 2023 12:59 PM
- Actualizado 20 junio, 2023 6:00 PM

Se veía venir a la velocidad de la luz, y quizá no exista cameo en el multiverso que pudiera lograr algo en contra de esta “intersección inevitable”. En su primer fin de semana en cartelera, Flash (The Flash) ha resultado una decepción, recaudando “tan sólo” 139 millones de dólares (MDD) en taquilla a nivel mundial (de acuerdo a Box Office Mojo al momento de la redacción). De ellos, apenas 55 millones vinieron de la taquilla estadounidense.

Para cualquier otra producción, se trataría de una cantidad nada despreciable. Sin embargo, estamos hablando de uno de los blockbusters más importantes de Warner Bros. para el verano, basado en una de sus franquicias más importantes y que, según reportes, tuvo un presupuesto de producción de unos 200 MDD.

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Es decir que, sin contar los gastos de publicidad y promoción (estimados en al menos 100 MDD adicionales), la película se encuentra en una complicada carrera por recuperar sus costos que quizá ni Barry Allen pueda ganar.

Si bien una recuperación no es algo sin precedentes (en 2015, la primera Ant-Man estrenó con 57 MDD en Estados Unidos, y cerró con casi 520 MDD a nivel mundial contra un presupuesto de 130 MDD), el panorama pinta difícil. El horizonte del verano cinematográfico trae la quinta Indiana Jones de Disney, la nueva Misión: Imposible con Tom Cruise, Oppenheimer de Christopher Nolan y Barbie de la propia Warner.

El futuro de Flash comienza a parecerse más al del más reciente fracaso del Universo Extendido DC (DCEU), Black Adam, con Dwayne Johnson. La película del antihéroe, presupuestada en 200 MDD, sólo recaudó 67 millones de dólares en la taquilla estadounidense durante su primer fin de semana y cerró con 393 MDD. No alcanzó su punto de equilibrio, estimado en 400 MDD.

¿Por qué Flash fracasó en taquilla?

En cualquier caso, es difícil atribuir una sola causa al desempeño decepcionante de un estreno en la taquilla. Sin embargo, el complicado historial de Flash detrás de cámaras nos sugiere que no fue una sola cosa, sino la combinación de varias.

La conducta de Ezra Miller

El primer asunto es que la estrella de la película entera es una figura en extremo problemática. Desde 2020, el actor fue protagonista de diversas polémicas por su conducta personal, desde agresiones físicas y arrestos hasta denuncias por el grooming de una menor y delirios mesiánicos.

Los hechos no sólo complicaron la comunicación de la producción –Flash ha sido promocionada tanto con el Batman de Michael Keaton y la Supergirl de Sasha Calle–, sino que agriaron la respuesta de ciertos sectores del público. No hay suficientes tributos a DC Comics y a las películas de Tim Burton para cambiar las opiniones de quienes no piensan dar su dinero a un blockbuster protagonizado por un criminal.

Ezra Miller en Flash
Ezra Miller supuso todo un problema de comunicación para el estudio (Crédito Warner Bros.)

A pesar de que Miller ya se encuentra en tratamiento para sus “complejos problemas mentales”, Warner Bros. ha hecho todo para rodear su protagónico. El actor sólo hizo un breve acto de presencia en la alfombra roja del estreno mundial de la película.

El final del DCEU y el reboot de James Gunn

Entre los problemas de Ezra Miller y las infinitas salidas en falso de la producción –el plan original era estrenarla en 2018–, Flash llegó demasiado tarde a la fiesta. Una fiesta cuyo final, de hecho, fue anunciado hace bastante tiempo.

Dado el irregular desempeño creativo y en taquilla del DCEU –concebido bajo la visión artística de Zack Snyder con El hombre de acero de 2013–, y con las gestiones contradictorias del estudio bajo Geoff Johns y luego Walter Hamada, DC Films y la franquicia misma fueron terminadas en 2022.

La nueva administración de Warner Bros. Discovery bajo David Zaslav anunció la reorganización del estudio como DC Studios, gestionado creativamente por James Gunn (quien antes dirigió Guardianes de la Galaxia para los rivales en Marvel Studios) y el productor Peter Safran. El nuevo par de directivos anunciaron el reboot de la franquicia, dando lugar a un nuevo Universo Cinematográfico de DC.

Esto fue meses antes del estreno de Flash, que finalmente fue terminada y programada para llegar a cines en 2023. Es bastante posible que sectores del público hayan decidido no ir a las salas con conocimiento de causa. ¿Para qué ir a ver una película que ya no juega ningún rol en las futuras producciones de DC?

Michael Keaton como Batman en Flash
Ni siquiera Batman pudo salvar a Flash de ser daño colateral corporativo (Crédito: Warner Bros.)

Lugar y momento equivocados (todo es culpa de Spider-Man)

La llegada de Flash a la cartelera tuvo otro desafortunado efecto secundario. En una época en que parecen proliferar las películas con narrativas sobre multiversos, Warner lanzó la suya dos semanas después de Spider-Man: A través del Spider-verso. Dejando de lado su espectacular e innovador apartado visual, la propuesta de Sony Pictures brinda una perspectiva mucho más interesante de los multiversos.

“El que golpea primero, golpea dos veces”, dicen por ahí. Y cuando el público tiene tiempo y presupuestos limitados, toda lógica indica que pocos verán la misma película dos veces.

Spider-Man: A través del Spider-verso
La cartelera tiene una mejor película de multiversos al mismo tiempo que Flash (Crédito: Sony Pictures)

En general, mal “boca en boca”

Una película puede tener al director más renombrado y a las estrellas más taquilleras del planeta, acompañada por una formidable campaña de prensa y provenir de una de las franquicias más reconocibles de la historia. Sin embargo, todas viven y mueren por la recomendación del público: unos van a verla el viernes y la recomiendan a sus amigos, quienes van a verla el sábado o domingo. Este efecto “boca en boca” hace que la película crezca en los fines de semana siguientes (si le va bien) o tenga un temprano declive (si le va mal).

El hecho es que, más allá de sus excelentes cameos y su terrible CGI, Flash estaba muerta antes de nacer. El público es bastante consciente de las controversia de Ezra Miller y de los tejemanejes corporativos que hicieron de la película un despropósito. Simple y llanamente, la película llegó demasiado tarde, arrastrando demasiadas polémicas para su propio bien.

A esto hay que sumar que, en sí misma, la Flash es entretenida, pero inconsecuente en todo sentido. “La película termina prácticamente donde comienza, y toda su narrativa es básicamente prescindible. Es una historia sin pretensiones, pero que tampoco ofrece mucho a la mitología del personaje y carece de un sentido palpable de riesgo”, escribe Miguel Possebon en su crítica para Filmelier.

Y remata: “Además, es difícil pasar por alto que la película estuvo en producción durante años y, con un presupuesto de más de 200 millones de dólares, presenta efectos especiales que parecen estar inacabados”.

Salvo un milagro taquillero, pues, todo indica que Flash quedará en el retrovisor como un trago amargo en la historia de Warner Bros. y de las adaptaciones del personaje al cine. Una pena para él, pues fue su primera película en solitario. Pero hey, al menos hay cuatro Batmans y tres Supermanes diferentes ahí.

Flash continúa en salas de cine. Para compar boletos y saber más de la película, entra aquí.